lunes, 7 de febrero de 2011

El Mito de Dánae


Dánae, Gutav Klimt

Numerosos cuadros en la historia de la pintura muestran la lluvia  oro cayendo sobre Dánae ¿De qué nos hablan? ¿Cuál es el mito de Dánae?

Según la mitilogía griega, los padres de Dánae eran el rey de Argos Acrisio y Eurídice. Acrisio recibió un oráculo según el cual el hijo de Dánae le mataría. Y, como los griegos se tomaban muy en serio los oráculos, Acrisio encerró a su hija en una cámara subterránea de bronce con una guardia constante. Pero Zeus, que para algo es  el «padre de los dioses y los hombres», llegó hasta Dánae en forma de lluvia de oro, la sedujo y engendró a Perseo.

En la Dánae de Klimt este momento se refleja con un alto contenido erótico, la lluvia de oro cae entre las piernas de Dánae mientras su cara y su mano reflejan placer y pasión.


Esta otra Dánae de cuerpo nacarado, de Charles Émile August Duran es más sutil, pero tal vez no menos sensual. Su cuerpo está en una postura de total entrega y en la mano lleva una flor, símbolo de la virginidad.



La Dánae de Egon Schiele es más misteriosa y menos explícita, cosa rara en un pintor que no elude los detalles íntimos.



Esta Dánae del flamenco Jean Gossaert (también conocido como Mabuse) de 1527 nos muestra a una joven y ligera Dánae que recibe la lluvia del dios mientras su túnica se abre mostrando su pecho.





Esta Dánae de Artemisia Gentileschi tiene especial interés porque está pintada por una mujer en 1612. Dánae parece entregarse voluptuosamente a la lluvia de oro, mientras una criada recoge en su vestido lo que puede. ¿Afán de limpieza? ¿Recaudatorio?


La Dánae de Tiziano de 1553 se encuentra en El Prado y formó parte de un grupo de cuadros encargados al pintor por Felipe II.








En esta Dánae de Antonio Allegri de 1530 que está en la Galería Borghese de Roma, Eros parece un colaborador necesario que retira el paño para que nada se interponga entre Zeus y su ansiado objetivo.



La Dánae de Rembrandt de 1636, la muestra deseable y rodeada de riquezas, pero describe el encierro dorado más que la lluvia.

¿Pero qué pasó con Dánae y Perseo? Cuando Acrisio supo lo que había ocurrido, se negó a creer la historia de origen divino, encerró a Dánae con el bebé en un cofre y los lanzó al mar. Pero Zeus los protegió y llegaron a salvo a la isla de Séfiros. Tras varias peripecias, muerte de la Medusa incluída, Perseo mató accidentalmente a Acrisio con lo que se cumplió el nefasto oráculo. Así como la historia de Edipo y su padre inspiró a Freud y dio nombre a un complejo, todavía nadie, que yo sepa, ha estudiado la problemática de Perseo ni las implicaciones psicológicas de matar al abuelo.





El análisis de Dánae de Picasso de 1962 os lo dejo a vosotros, aunque parece algo dividida.


Más tranquila parece esta Dánae del pintor norteamericano contemporáneo Stone Roberts.

Perseo no ha dado nombre a un complejo pero sí a una lluvia de estrellas, Las Perseidas. También conocidas como las  Lágrimas de San Lorenzo, son una lluvia de meteoros de alta actividad, la más popular en el Hemisferio Norte  ya  que transcurre en agosto, mes de buen tiempo y de vacaciones. Tal vez una noche del próximo verano, cuando veamos una estrella fugaz, a ser posible en buena compañía, nos acordemos de Perseo, de Dánae y de los hermosos cuadros que su mito inspiró.





3 comentarios:

  1. ¡Enhorabuena,y gracias!. Como siempre, instructivo, inspirador y sugerente post.

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  2. hermoso artículo Alicia, la Dànae de Egon Schiele es especialmente cautivante y sugerente, gracias

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  3. Gracias a vosotros, libreoyente y adriana

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