¿Para qué "sirve" el arte?

                                          
                                       Sol ardiente de Junio Lord Frederic Leighton, 1895

Este cuadro prerrafaelita del siglo XIX puede servirnos hoy, en un día de diciembre del siglo XXI, para preguntarnos qué sentido o utilidad tiene el arte en nuestras vidas.

Tal vez nos sirvan respuestas simples como: para ver algo bello, para escapar de la gris realidad, para estimular los sentidos o la imaginación, para soñar, para viajar en el tiempo o en el espacio, para admirar lo que otros son capaces de hacer,...

Tal vez podamos tomar prestadas las palabras de Mario Vargas Llosa en su reciente discurso en la ceremonia del Premio Nobel: "Quien busca en la ficción lo que no tiene, dice, sin necesidad de decirlo, ni siquiera saberlo, que la vida tal como es no nos basta para colmar nuestra sed de absoluto, fundamento de la condición humana, y que debería ser mejor. Inventamos las ficciones para poder vivir de alguna manera las muchas vidas que quisiéramos  tener cuando apenas disponemos de una".

 Cambiemos ficción por arte y estas palabras seguirán teniendo sentido. Porque, ¿acaso el arte no nos permite en una tarde oscura de diciembre ser o contemplar una joven muchacha envuelta en gasas que se deja adormecer por la luz y el color?